La Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, obliga a las entidades de más de 50 personas en plantilla a contar con un Plan de Igualdad. En Índice Consultoría y Formación, encontrarás el asesoramiento y asistencia técnica necesaria para su diseño, implantación, seguimiento y evaluación.
Atendiendo a la nueva normativa en la materia, resulta de aplicación no solo la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, sino también el Real Decreto-ley 6/2019, de 1 de marzo, el Real Decreto 901/2020, de 13 de octubre, por el que se regulan los planes de igualdad y su registro y también el Real Decreto 902/2020, de 13 de octubre, de igualdad retributiva entre mujeres y hombres.
Según las novedades legislativas, para disponer de un plan de igualdad en el seno de una empresa, se deberá atender a diferentes cuestiones, en primer lugar, según el calendario de implantación para disponer de planes de igualdad y según el número de personas en plantilla, se tiene la obligatoriedad para:
Las empresas de 151 a 250 personas trabajadoras hasta el 7-3-2020.
Las empresas de 101 a 150 personas trabajadoras hasta el 7-3-2021.
Las empresas de 50 a 100 personas trabajadoras hasta el 7-3-2022.
Para el resto de las entidades, su elaboración será voluntaria, eso sí, deberán atender a la normativa existente para tal finalidad.
La elaboración e implantación de un Plan de Igualdad de Oportunidades conlleva importantes beneficios a las organizaciones:
1. Mejora del ambiente de trabajo y de las relaciones laborales.
2. Mejora de la calidad y de las habilidades del personal (plantilla).
3. Mejora de la satisfacción personal.
4. Mejora de la calidad de vida de los/as trabajadores/as.
5. Mejora de la salud laboral de la plantilla.
6. Mejora de las ratios de la plantilla: disminuye los niveles de absentismo, la rotación de personal, etc.
7. Mejora de la gestión empresarial debido a la complementariedad con el estilo de liderazgo femenino (más dialogante, conciliador, democrático, pedagógico, una actitud más receptiva y participativa)
8. Cumplimiento de la legislación vigente.
9. Mejora de la imagen, reputación y prestigio de la empresa.
10. Enriquecimiento de la organización en términos económicos, a través de indicadores como la productividad, la calidad de servicio, la satisfacción y fidelización de los clientes, etc.; Cada vez se tiene más en cuenta que la calidad de los trabajadores/as se establece como un elemento diferenciador con respecto a la competencia