Familias, centros educativos y sociedad en general se están encontrando en la actualidad con una serie de problemáticas en la educación de los niños y adolescentes que desbordan, en muchas ocasiones, su quehacer familiar y profesional. Estas situaciones pueden generar desconcierto, frustración e incertidumbre al no saber qué hacer y cómo entender lo que está ocurriendo, lo que dificulta en la misma medida cómo poder ayudar.
Conductas disruptivas, conflictos, niños rebeldes, maltrato entre iguales, trastornos de conducta…, son algunos de los conceptos que se utilizan para referirse a esas problemáticas y que constituyen una fuente de preocupación tanto para las familias como para los profesionales que, a pesar de estar implicados en una problemática común, con demasiada frecuencia intentan abordarla desde posiciones diferentes.
Este curso pretende tratar en profundidad este tipo de problemáticas desde una perspectiva compleja (integrando lo conductual, emocional y cognitivo como una totalidad) y ecosistémica, es decir, contextualizada en un todo global con una estrecha interrelación entre las partes.
- Capacitar al alumno para desarrollar una correcta intervención socioeducativa con menores en riesgo, bien sea desde el propio aspecto residencial o familiar y social.
- Obtener un conocimiento multidisciplinar del trabajo con menores, capacitando para abordar las acciones a desarrollar con éste colectivo desde una perspectiva integral.
- Dotar al alumno de los conocimientos, habilidades y competencias necesarias para una óptima atención e intervención social y educativa con menores.