Esta certificación proporciona un modelo de sistema de gestión para el control de los riesgos biológicos en las actividades, productos o servicios prestados por cualquier Organización.
Es útil para los clientes a la hora de identificar y evaluar los riesgos potenciales por agentes biológicos de cualquier tipo y ayudar a cumplir los nuevos requisitos legales decretados por la situación de estados de alarma presentes y futuros, así como garantizar una adecuada gestión de la continuidad del negocio.
Los riesgos se han gestionado en las nuevas versiones de otras Normas de Gestión como base del sistema; no obstante, hasta la alarma sanitaria provocada por el COVID-19 no se han tenido en cuenta los riesgos originados por cualquier agente biológico y, en muchos casos, no se ha llevado a cabo de una manera sistemática y coherente.
Esta especificación proporciona una base que establece un conjunto de requisitos que permiten a cualquier organización pública o privada desarrollar, implementar y mejorar de manera continua un sistema de gestión para el control de los riesgos biológicos, cuyo objetivo sea integrarse de forma eficaz en todos los procesos de la organización, así como en las políticas, los valores, la toma de decisiones y, en general, en la cultura existente.
Con todo ello, se consiguen gestionar los riesgos globales que podrían crear, mejorar, prevenir, acelerar o retrasar el logro de los objetivos y asegurar eficazmente la sostenibilidad, continuidad del negocio y la consecución de los objetivos de la organización.
Esta especificación establece un sistema de gestión del riesgo basado en la metodología conocida como Planificar – Hacer – Verificar – Actuar (PHVA) y compone una herramienta de gestión compatible e integrable con otros sistemas de gestión de alto nivel como ISO 9001 (Sistema de Gestión de Calidad), ISO 14001 (Sistema de Gestión Ambiental), ISO 45001 (Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo), entre otros.
Las organizaciones certificadas obtendrán diversas ventajas:
- Fortalecimiento de la capacidad de gestión de riesgos.
- Posibilidad de prestar un servicio de mayor calidad.
- Reducción de los costes directos e indirectos causados por las interrupciones de los servicios.
- Menor exposición a los riesgos derivados de la posible pérdida de clientes debido a la pandemia del COVID-19.
- Responde a una necesidad real y urgente del Mercado. Evita la propagación del Virus SARS-COV-2.
- Protege a clientes, trabajadores, productos y servicios.
- Vigila el cumplimiento de la legislación aplicable.
- Evita sanciones y/o potenciales responsabilidades civiles o penales.
- Es compatible y complementario con los estándares y buenas prácticas existentes.
- Certificable con los diferentes modelos existentes en el mercado